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Cambio Climático, Economía Circular y Turismo

El modelo circular puede ser la base con la cual abordar la recuperación y la reactivación de este sector. La Economía Circular surge como una solución práctica a las necesidades del turismo sustentable, especialmente desde la acción de las empresas de esta industria, incorporando criterios de sustentabilidad y al mismo tiempo generando efectos positivos que hacen más rentables sus modelos de negocios. Es decir, avanzar desde un modelo lineal a una oferta circular hace posible mejorar simultáneamente el medioambiente, la calidad de vida de las personas y la rentabilidad de las empresas turísticas.

Publicado el 30/04/2021

Por Marilú Mansilla, asistente técnico de proyecto Eurochile.

La industria del Turismo es una de las más afectadas por la pandemia por Covid-19 que hoy vive el mundo. En efecto, las medidas de confinamiento necesarias para controlar el virus han producido una crisis profunda en una industria que, por definición de la Organización Mundial de Turismo (OMT), es un fenómeno social, cultural y económico relacionado con el movimiento de las personas a lugares que se encuentran fuera de su lugar de residencia habitual, por motivos personales o de negocios. A nivel mundial, la actividad turística cayó en un 75,1% en 2020 y, si bien repuntó a comienzos de 2021, sigue sufriendo a causa de los rebrotes de la pandemia.

Sin embargo, esta crisis sanitaria no nos debe cegar frente a la crisis climática que seguimos experimentando, y de la cual también nos debemos hacer cargo. En este ámbito, hay desafíos que deben ser abordados por todos los actores: turistas, anfitriones e industria turística. Esta última abarca todo el tejido empresarial destinado a cubrir la demanda turística y varía fuertemente según el destino. En el caso chileno, la industria turística está compuesta en un 75% por Pymes.

Los impactos del turismo sobre el medioambiente son significativos. Antes de la pandemia se estimaba que la industria generaba 1,5 kilos de basura por persona por día en el destino, además de residuos de aguas servidas o residuales, erosión y degradación del entorno a causa de las actividades turísticas, deterioro del hábitat de la flora y fauna, entre otros. Estas son externalidades negativas que quedan en el destino, y si nadie se hace cargo de corregirlas o mitigarlas, el daño económico, social y ambiental será irreversible.

Frente a esto, la contracción actual de la industria turística ofrece una gran oportunidad para repensar la forma en que se está llevando a cabo esta actividad. Esto es especialmente notorio en algunos destinos que históricamente se han visto más saturados. Se requiere trabajar por el desarrollo de un turismo sustentable, y en esta materia la Economía Circular surge como una solución práctica.

El modelo circular puede ser la base con la cual abordar la recuperación y la reactivación de este sector. La Economía Circular surge como una solución práctica a las necesidades del turismo sustentable, especialmente desde la acción de las empresas de esta industria, incorporando criterios de sustentabilidad y al mismo tiempo generando efectos positivos que hacen más rentables sus modelos de negocios. Es decir, avanzar desde un modelo lineal a una oferta circular hace posible mejorar simultáneamente el medioambiente, la calidad de vida de las personas y la rentabilidad de las empresas turísticas.

Según el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático de Chile, las Pymes son quienes tendrán mayor dificultad en la diversificación y adaptación de su empresa al cambio climático. Por ello, debería ser este segmento de empresas el destinatario prioritario de políticas y programas que promuevan la incorporación de la Economía Circular en sus procesos, haciéndolas más eficientes y también capaces de adaptarse al cambio climático y a los requerimientos de unos consumidores (especialmente los extranjeros) cada vez más conscientes de su huella hídrica o de carbono.

Para ello es necesario difundir y facilitar el desarrollo de modelos de negocio circulares, cadenas de valor circulares; promoviendo modelos de fabricación, manufacturas sostenibles, basados en la reducción de consumo; la reutilización de componentes, sistemas de producción limpia y uso de energías renovables. Ya no es suficiente que las empresas incorporen elementos como la separación de residuos o sistemas de ahorro de energía si no aplican reales cambios en su forma de operar. No se espera que logremos un impacto cero, sino que incorporen soluciones que entreguen un impacto positivo en el sistema y con esto se logre generar destinos turísticos sustentables y circulares.

En este trabajo Europa nos lleva la delantera. En 2015, la Comisión Europea lanzó el plan “Cerrar el círculo: un plan de acción de la UE para la Economía Circular” dando inicio formal a la transición de Europa hacia una Economía Circular, y con esto promover el crecimiento económico sostenible. Gracias a ello, se han generado un sinnúmero de iniciativas de las cuales hemos aprendido; gracias al contacto de Eurochile con las entidades empresariales y tecnológicas del Viejo Continente. En nuestro país, la Fundación ha trabajado fuertemente en potenciar la Economía Circular en Chile, ejecutando iniciativas como un programa de difusión tecnológica en Economía Circular, seminarios y talleres especializados en esta temática, y trabajando con pymes por medio de la metodología de medición del ciclo de vida. Además, la Fundación está a cargo del proceso de elaboración y redacción del documento de la Hoja de Ruta para Economía Circular en el país, encargado por el Ministerio del Medio Ambiente.

Sabemos que aún queda mucho que trabajar, no contamos aún en el país con una hoja de ruta específica de Economía Circular para el sector turismo, y muchos de estos conceptos son aún desconocidos para la mayoría de las Pymes. Sin embargo, estamos bajo la posibilidad única de, con apoyo de entidades como Eurochile y el compromiso y esfuerzo de las empresas y las entidades públicas de fomento nacional y regional, avanzar en esta ruta y transformar el turismo en una industria cada vez más eficiente, sustentable y circular.