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Gestión de Residuos y Circularidad en la Provincia de Osorno: Talleres de Eurochile con la Experiencia de un Experto Europeo

Ferran Climent, co-fundador de RedEcoec y experto español en Economía Circular, participó en los talleres llevados a cabo en Rupanco y Puyehue, en la provincia de Osorno. Durante estas sesiones, presentó diversas modalidades circulares y un plan integral de valorización y reciclaje diseñado para la región, en el marco del programa “Fortalecer Reciclaje y Economía Circular”.

Publicado el 19/12/2023

RedEcoec es una agrupación empresarial cuyo propósito es generar un impacto significativo en los tres pilares de la sostenibilidad: Economía, Medio Ambiente y Sociedad. Su enfoque principal es impulsar la ventaja competitiva de las empresas mediante la aplicación estratégica de los principios de la Economía Circular y la Ecología Industrial. Este objetivo se logra a través del establecimiento de redes sinérgicas entre empresas, organizaciones y entidades públicas, con el propósito de minimizar al máximo la generación de residuos.

Además, realiza análisis y diagnósticos de los recursos disponibles, lo que le permite proponer soluciones innovadoras mediante la colaboración entre diversas cadenas de valor y sectores. La meta es transformar las debilidades individuales en fortalezas colectivas, promoviendo así un uso más eficiente de los recursos del entorno y dando origen a la creación de Comunidades Circulares.

En ese sentido, tuvimos la oportunidad de entrevistar a Ferran Climent, experto español en Economía Circular y co-fundador de RedEcoec, quien participó de los talleres llevados a cabo en Puyehue y Rupanco, Osorno, como parte del programa “Fortalecer Reciclaje y Economía Circular en la Provincia de Osorno”. Este programa cuenta con el apoyo financiero del Gobierno Regional de Los Lagos a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR). Su objetivo principal es fortalecer y mejorar los procesos asociados para reducir el impacto ambiental negativo causado por el manejo inadecuado de residuos, tanto orgánicos como inorgánicos, generados en actividades domiciliarias e industriales de la Provincia.

A la derecha, Ferran Climent, experto español en Economía Circular y co-fundador de RedEcoec.

  • ¿Cuáles son los desafíos actuales en la gestión de residuos?

Los desafíos actuales que enfrentamos en la provincia de Osorno, específicamente en las comunas donde llevaremos a cabo el proyecto, Puyehue y Rupanco, se centran principalmente en el aislamiento rural y la desconexión con la población urbana. Para abordar de manera efectiva la gestión integral del territorio, es fundamental establecer líneas de colaboración con las municipalidades, empresas y comunidades más apartadas. Buscamos asegurar que las estrategias de gestión sean eficientes tanto en términos de impacto ambiental como económico, considerando cuidadosamente los costos asociados con la retirada de los residuos.

  • ¿Cuáles son las tendencias para reducir los residuos que se pueden adoptar en la vida diaria?

En términos de participación ciudadana, existen diversas acciones que pueden abordarse. Uno de los problemas fundamentales es la gestión de residuos orgánicos, y compostar de manera individual se presenta como una solución destacada, especialmente para aquellos que disponen de terrenos propios, ya que esto podría resultar en una reducción del 50% de los residuos generados. Por otro lado, al considerar la categoría de residuos mixtos, que incluyen papel, cartón, plástico y vidrio, el plástico, en particular, se destaca como el problema principal y, al mismo tiempo, como uno de los más fácilmente solucionables. Esto se puede lograr mediante la sustitución de botellas de un solo uso por opciones reutilizables. Además, es importante tener en cuenta que el vidrio y el cartón presentan alternativas de disposición más sencillas, ya sea a través de los recicladores locales o mediante la gestión municipal de residuos. La posibilidad de utilizar y reutilizar envases de vidrio o cartón, como se ha observado en diversas prácticas a lo largo del proyecto, surge como una alternativa viable frente al consumo de plástico y su consiguiente impacto ambiental.

  • ¿Qué tecnologías innovadoras se utilizan actualmente para regular la gestión de residuos, tanto domiciliarios como industriales?

En relación con la materia orgánica, una de las tecnologías que pueden emplearse es la que se explicó en el objetivo 1 de este proyecto durante el taller: el uso de la calculadora de compost TUMH. Cada agricultor, productor o persona con una compostadora puede utilizar esta aplicación para crear compost de calidad a partir de materiales orgánicos, tanto estructurantes secos como orgánicos frescos. Paso a paso, utilizando esta aplicación, pueden observar cómo mejora la fertilidad del compost que van a utilizar y cómo pueden mejorar las propiedades del suelo de manera fácil y sencilla, educándose en el proceso.

En cuanto a las nuevas tecnologías que abordaremos para la industria agroalimentaria en el próximo taller, presentaremos el “Food waste for food back”. En este taller, estamos transformando los residuos, especialmente los provenientes del sector de frutas y hortalizas, que tienen una base de fibras. Buscamos reemplazar el embalaje de baja calidad derivado del plástico por esta nueva fibra vegetal. Este nuevo embalaje no solo aborda el problema ambiental, sino también el económico asociado con la compra y generación de envases de plástico, permitiendo la reutilización de un recurso que antes terminaba en compost o vertedero. Esto agrega valor al embalaje de frutas y verduras destinadas a los consumidores.

Como otra propuesta de tecnología innovadora, desde Bélgica, surge la empresa Ecovative, que utiliza materia orgánica para criar hongos. La parte comestible de estos hongos se distribuye en el sector agroalimentario, mientras que el micelio, la parte vegetativa, se utiliza en diversas industrias. Esto incluye el sector del embalaje, donde la forma del objeto determina la adaptación del embalaje, eliminando así el uso de polipropileno. Además, estos micelios se emplean en la industria cosmética, la producción de fibras para nuevos tejidos a partir de formas vegetales y en la creación de nuevos materiales biobasados mediante la carga de esta parte orgánica del micelio.

  • ¿Cuáles son las políticas gubernamentales en España relacionadas con el reciclaje y la gestión de residuos?

En España, al igual que en todos los países miembros, en respuesta al Pacto Verde Europeo, derivado del movimiento de la economía del bien común en 2015, que impulsó la responsabilidad social corporativa de las empresas, se busca alcanzar una economía circular mediante tres legislaciones principales a nivel europeo. A nivel nacional, en España, estas directivas ya se han transpuesto, y en nuestro territorio, como es el caso de la Comunidad Valenciana, ya contamos con una legislación propia a nivel regional. Nos referimos a las áreas de residuos y suelos contaminados para una economía circular, donde se pretende, por un lado, reducir precios que no fomenten la economía circular y, por otro lado, establecer fondos económicos para incentivar a las empresas que den este paso, mediante diferentes artículos y líneas de financiación.

Además, se ha introducido una nueva ley, que no existía antes de este nuevo paquete legislativo del Pacto Verde Europeo: la ley de transición energética y cambio climático. Esta ley adapta medidas específicas a cada territorio en función de sus características climáticas y los riesgos asociados, tanto para la administración pública como para el sector privado. Se abordan temas como la transición energética para eliminar los combustibles fósiles y promover el uso de energías renovables, así como la protección contra eventos como inundaciones y los cambios en los cultivos debido al aumento de la temperatura, entre otras acciones.

Por último, la tercera ley más relevante, aprobada en la Comunidad Valenciana y también en proceso en Chile, es la ley de reforzada responsabilidad social y empresarial. En España, específicamente en la Comunidad Valenciana, para incentivar buenas prácticas empresariales con reconocimiento y premios, se otorgan entre un 30% y un 40% más de puntuación en licitaciones públicas para la administración. Esto se aplica si las empresas llevan a cabo acciones ambientales y sociales, especialmente en el ámbito educativo. Para obtener estos beneficios, las empresas deben ir más allá de ser meramente económicas, calculando su huella de carbono, implementando planes de igualdad para promover la equidad de género y cumpliendo otros requisitos de responsabilidad social empresarial.

  • ¿Qué prácticas circulares españolas se pueden replicar y aplicar en Chile?

En términos de prácticas sostenibles, abordaremos dos enfoques distintos. En el ámbito energético, nos gustaría presentar el concepto de una comunidad energética local, donde la municipalidad, la ciudadanía y las empresas colaboran para establecer una cooperativa de energías renovables. En el caso de la Comunidad Valenciana, las placas solares son la opción más eficiente debido a la radiación solar, aunque también se pueden considerar fuentes como la energía eólica o mareomotriz. Este enfoque implica la creación de una comunidad entre los propietarios de estas infraestructuras para facilitar el intercambio de energía y promover el consumo sostenible. Este modelo descentraliza el consumo energético, reduciendo la dependencia de fuentes no renovables como el carbón, otorgando soberanía energética y estableciendo precios justos basados en la vida útil de la energía, evitando la volatilidad del mercado y permitiendo la autosuficiencia de la población.

En el ámbito industrial, en la Comunidad Valenciana y a nivel estatal en España, se están implementando entidades de gestión y modernización de áreas industriales. En estas asociaciones, los empresarios colaboran para abordar cuestiones energéticas, de materias primas y de infraestructura con un ente gestor que actúa como portavoz de los empresarios ante la municipalidad. Esta colaboración público-privada tiene como objetivo mantener satisfechas a las empresas, que son generadoras de riqueza económica para el municipio. En este contexto, se llevan a cabo prácticas de simbiosis industrial como parte de la gestión y modernización de las áreas industriales. Esto implica explorar intercambios de residuos que puedan convertirse en materia prima para otras empresas, así como gestionar de manera colectiva los residuos comunes entre productores para reducir costos e impactos. Asimismo, se considera la posibilidad de realizar compras conjuntas de una misma materia prima para optimizar recursos.

  • Luego de tu visita a la Provincia de Osorno, ¿qué desafíos tienen las empresas a corto y largo plazo?

Tras los primeros días de visitas en terreno, hemos podido extraer algunas conclusiones, aunque es necesario continuar las visitas. Observamos que es crucial fortalecer la colaboración entre las empresas y fomentar un mayor conocimiento mutuo para aprovechar los beneficios inherentes a la economía circular, la cual se fundamenta en la colaboración. La simbiosis industrial, que implica colaborar y conocerse entre empresarios, permite identificar oportunidades para ahorrar dinero y reutilizar las acciones de unos y otros. En el ámbito industrial, especialmente en sectores más turísticos y comerciales, es evidente que las empresas deben unirse y trabajar en conjunto para gestionar los residuos de manera adecuada, lo que, a su vez, contribuirá a la reducción de costos. Además, esta colaboración proporcionará una ventaja competitiva y un diferenciador ante consumidores cada vez más conscientes, ya que las prácticas sustentables ofrecen un valor añadido al momento de tomar decisiones de consumo.

  • ¿Cómo se puede motivar a las empresas chilenas a que sigan implementando medidas circulares?

Para motivar a las empresas, el primer paso es mostrarles con claridad el retorno económico que pueden obtener, no solo a corto plazo, sino también a medio y largo plazo. Estas acciones, que implican cambiar la perspectiva de trabajo, pueden ofrecer un recorrido empresarial más duradero gracias a nuevas prácticas. La sostenibilidad, como lo sugiere la propia palabra, implica mantener la misma actividad durante un período más prolongado. Aplicar enfoques de economía circular permitirá a las empresas contar con proveedores locales sin riesgo de abastecimiento, fomentará relaciones comerciales más sólidas con clientes locales y facilitará la fidelización. Además, estas prácticas pueden contribuir a expandirse en mercados internacionales, diferenciarse y posicionarse con un compromiso circular. Por lo tanto, la Economía Circular debe considerarse como una estrategia, no como un cambio repentino, sino como una transición que brindará beneficios a largo plazo.