Las buenas prácticas son un conjunto de acciones y actividades que contribuyen a reducir el uso y optimizar los recursos naturales, y con ello disminuir el impacto negativo de las actividades cotidianas en el medio ambiente. Existe un consenso absoluto en Europa sobre la importancia del desarrollo y la aplicación de este instrumento para hacer frente a los efectos adversos del cambio climático.

En este contexto, el Turismo Mundial desempeña un papel clave en el proceso de adaptación y transición energética de productos y servicios, debido a su contribución a la economía y a la movilidad de millones de turistas en todo el planeta. España es líder en el desarrollo del Turismo Sostenible, siendo un destino por excelencia que ha generado valor añadido mediante la aplicación de estrategias de sostenibilidad en aspectos medioambientales, sociales, energéticos, hídricos y de gestión de residuos

Basándose en experiencias y modelos exitosos españoles, la Fundación Empresarial Eurochile está impulsando un proceso de transformación sustentable de la actividad turística en la región de Coquimbo a través del programa “Turismo regional con Economía Circular”, financiado por el Gobierno Regional mediante el Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC). Este programa tiene una duración de 18 meses y representa un desafío importante en la transición hacia un enfoque de adaptación y transición energética en los diferentes destinos y productos turísticos ofrecidos en la región.

En los diferentes módulos del programa, se ha incentivado a las MiPymes a aplicar buenas prácticas en los servicios y productos turísticos que ofrecen, basadas en exitosas experiencias desarrolladas en Europa y tomando como referencia el servicio que ofrece España. En este sentido, se destacan importantes experiencias europeas que han adoptado principios de economía circular para impulsar el Turismo Sustentable. Las Empresas Turísticas Españolas están comprometidas con la medición de la huella de carbono en la cadena de suministro, la descarbonización basada en la ciencia, el impulso del uso de energías renovables, la promoción de la movilidad sostenible y la fomentación de la digitalización.

Se resaltan exitosas experiencias de buenas prácticas en diversas áreas del turismo, como alojamientos, excursiones, restaurantes, eventos, entre otros. En el sector alojativo, la cadena española Iberostar es un ejemplo destacado de incorporación de medidas de circularidad. Gracias a un claro compromiso con la sostenibilidad y la circularidad, y tras realizar un autodiagnóstico de su situación inicial, el grupo Iberostar elaboró su propia política de sostenibilidad, centrada en cinco compromisos a largo plazo.

El grupo Iberostar está a la vanguardia de la circularidad a nivel internacional, no solo buscando convertir sus hoteles en establecimientos circulares, sino también transformar los destinos donde operan. Entre los múltiples compromisos que como grupo hotelero están llevando a cabo se encuentran: la creación de un departamento de gestión de residuos para implementar estrategias de reducción y eliminación con un enfoque en la economía circular, el desarrollo de un plan de eficiencia energética con objetivos anuales para la reducción de gases de efecto invernadero, la minimización del impacto ambiental de la empresa y la promoción de un modelo de abastecimiento y consumo local responsable, así como el uso de materiales sostenibles en nuevas construcciones.

Otro ejemplo de apuesta por la circularidad, en este caso vinculada a la restauración, es la iniciativa LebonPicnic en Francia. Se trata de un servicio de ventanilla única, clic y recogida, que permite a los cicloturistas encontrar y comprar picnics producidos localmente mientras exploran la Francia rural. Un mercado en línea conecta a los usuarios con una red de productores locales de alimentos artesanales, incluyendo carniceros, charcuteros, panaderos, pasteleros, tenderos, empresas de catering y restaurantes, a los que pueden hacer pedidos para recoger al día siguiente.

De esta manera, se ofrece al viajero una opción de picnic que es 100% artesanal y que utiliza productos frescos, de temporada y locales siempre que sea posible. Además, LebonPicnic promueve el uso de envases y empaques reciclables o biodegradables, y gracias a su sistema de producción bajo demanda, evita el desperdicio alimentario.

En el ámbito de la revalorización de los residuos, el caso de DeleiteWear es un gran ejemplo. La propuesta de DeleiteWear consiste en reutilizar el residuo textil de alojamientos y restaurantes para transformarlos en uniformes y merchandising con valor social y ambiental. Las prendas diseñadas por DeleiteWear a menudo incluyen un mensaje bordado para resaltar el impacto positivo que generan, como por ejemplo “soy una sábana con una segunda oportunidad y he ahorrado 2500L de agua”. Además, las prendas de DeleiteWear son confeccionadas localmente en talleres de inserción social en España.

Por otro lado, en cuanto a viajes y experiencias turísticas sostenibles, la agencia Intrepid Travel es un referente. Muchos de sus viajes incorporan principios de circularidad que pueden servir como modelo a seguir.

En definitiva, los expertos indican que la adopción de medidas que incorporen buenas prácticas dependerá de la realidad y contexto de cada empresa turística. No obstante, la disponibilidad de opciones, soluciones y mecanismos de adaptación es diversa, por lo que la oportunidad para iniciar el proceso de cambio dependerá de la voluntad de cada empresario y destino turístico. El camino hacia la sostenibilidad del turismo ya está trazado, y es esencial para enfrentar los nuevos retos y desafíos.