Christophe Duquenne, de TerraNIS Chile: “Queremos entregar herramientas de agricultura de precisión a cooperativas y productores que aún no acceden a este tipo de datos”
Con más de tres años de presencia en Chile, hoy esta pyme francesa especializada en servicios de geoinformación se constituye oficialmente como una empresa en el país. Su objetivo es aprovechar el potencial nacional en agricultura, viñas y turismo para brindar herramientas que ayuden a las empresas a optimizar sus procesos, pero también -a largo plazo- expandirse a otros países de la región. Y a través del trabajo conjunto con Eurochile, impulsar proyectos de transferencia tecnológica a empresas locales.
El año 2016 la empresa TerraNIS, innovadora pyme francesa especializada en el diseño, desarrollo y comercialización de servicios de geoinformación a partir de imágenes satelitales y de drones, inició sus primeras prospecciones en Chile atraída por la gran cantidad de hectáreas de viñas del país, así como su estabilidad económica y social.
Esto porque la compañía creada tres años antes por Marc Tondriaux y David Hello, ambos con más de 25 años de experiencia en aplicaciones espaciales adquiridas en el grupo Airbus, tiene su principal foco de trabajo en los ámbitos de la agricultura, el medio ambiente y la gestión de territorios. Esto llevó a que en 2017 Tondriaux participó de varias misiones a Chile y comenzó a generar contactos comerciales, lo que fue acrecentando su interés por instalarse en nuestro país.
Ese mismo año llegó la primera representación comercial, pero el proceso de instalación en el país se terminó de concretar formalmente en marzo de este año, cuando TerraNIS se constituyó oficialmente como una empresa chilena. Como parte de la red de centros de enlace e información de Copernicus, del que también participa Eurochile, ambas entidades han generado un contacto estrecho y TerraNIS participa activamente de los seminarios, ruedas de negocios y talleres que realiza la Fundación.
En esta entrevista Christophe Duquenne, responsable comercial de TerraNIS Chile, conversa con Eurochile sobre las oportunidades que se abren en el país en esta nueva etapa, así como en las perspectivas de colaboración conjunta con la Fundación para nuevos proyectos.
Terranis lleva más de tres años operando en Chile ¿Por qué les interesó trabajar en nuestro país, y cuáles son las principales oportunidades que ven para el desarrollo de su empresa?
Con sus 150 mil hectáreas de viñas y estabilidad económica, Chile parecía un mercado ideal para probar nuestros productos en 2017. Ahora ya tenemos clientes y experiencia en este mercado, no solamente en temas de agricultura de precisión sino que en gestión del territorio con servicios para zonas forestales y mapas de ocupación de suelo, por ejemplo. Además, Chile está al lado de Argentina, que cuenta con una impresionante superficie de viñas; y de Perú, con el sector de la agricultura en pleno desarrollo.
¿En qué áreas se encuentran trabajando principalmente hoy, cuáles son sus principales proyectos y con qué tipo de servicios?
En Chile hemos diversificado nuestros servicios para la agricultura con distintos servicios: seguimiento del crecimiento de los cultivos y detección de anomalías (Pixaigri y CropEO), optimización de la fertilización en nitrógeno (Fertisat) y del riego (con Wago). También ofrecemos servicios específicos para la gestión de zonas forestales, ocupación de suelos, la vegetación y el arbolado urbano (Greencity), zonas de calor en ciudades, gestión y planificación urbana y territorios agrícolas. Acabamos de cerrar un proyecto junto con el CIREN sobre estudios de incendios y los impactos en la provincia de Concepción. Nos interesa llevar más proyectos en colaboración con entidades locales en el futuro.
¿Por qué decidieron constituirse formalmente en Chile, qué ventajas tiene ello y cuáles son los objetivos de largo plazo que se están planteando?
Las oportunidades de negocio y el clima económico del país nos parecían ideales para exportar nuestros servicios a este nuevo mercado. Además, desde Chile podremos alcanzar otros mercados como Argentina, que cuenta con una gran superficie de viñas. Pero también Perú, Brasil y Ecuador, que presentan oportunidades de desarrollo de la agricultura de precisión. Lo mismo con Colombia. En estos más de 3 años de presencia en Chile, validamos la idea inicial del potencial de hacer negocios en el país con la creación de la sucursal TerraNIS Chile SpA. A largo plazo, además de ampliarnos en estos países, queremos desarrollarnos aún más en Chile en los tres sectores de actividad –agricultura, viticultura y medioambiente–, encontrar distribuidores para nuestros servicios agrícolas e involucrarnos en otros proyectos para nuestras actividades de I+D con colaboradores chilenos.
¿Qué rol tiene hoy la georeferenciación en la agricultura, por qué es tan importante su aplicación?
La agricultura se está adaptando al clima económico y climático actual en el cual el productor tiene que optimizar los tiempos, los recursos y tener datos confiables para tomar las mejores decisiones. La agricultura de precisión brinda herramientas y datos al agricultor o empresa para que pueda optimizar sus procesos, enfrentar y anticipar los futuros desafíos del sector agrícola.
¿Cómo se traduce esto en un avance hacia una agricutura más eficiente y sostenible?
Un ejemplo concreto es nuestro servicio Oenoview, con cual una viña puede ahorrar hasta un 30% en fertilizantes, cuidando el medio ambiente y al mismo tiempo ahorrando tiempo y dinero. De la misma forma, Wago permite optimizar el riego de los cultivos, Fertisat el uso de abonos en cultivos extensivos, y con CropEO detectar con antelación problemas de crecimiento del cultivo.
¿Cuáles son las ventajas comparativas de Chile para implementar a gran escala este tipo de proyectos de georeferenciación en la agricultura?
Chile tiene un gran potencial vitivinícola y agrícola. La gestión de los espacios naturales es también de importancia. Los efectos del cambio climático dan la necesidad de adaptarse y optimizar los recursos. Queremos acompañar estos cambios con herramientas simples de soporte para adaptarse a estos cambios de la mejor manera posible.
¿Está pensado trabajar en transferencia tecnológica, o en el desarrollo conjunto de tecnología en el país con algunas instituciones nacionales?
¡Sí! De hecho acabamos de terminar un proyecto sobre los incendios forestales de 2017 en la Provincia de Concepción con el CIREN donde estudiamos las superficies quemadas, la ocupación del suelo de estas áreas, la severidad localizada del incendio, incluyendo un monitoreo de la vegetación pos incendio. Estamos viendo otras futuras potenciales posibilidades de proyectos similares con la CONAF y el Ministerio del Medio Ambiente, por ejemplo.
Ustedes, al igual que Eurochile, son parte de la red de centros de enlace e información de Copernicus. ¿Qué importancia tiene esta red en el trabajo que realizan, cuáles son sus principales ventajas?
Esto nos posiciona como punto de referencia para ilustrar de manera muy concreta el uso de datos geoespaciales Copernicus y ayudar a la difusión regional de estos. Para nosotros es importante destacar que hemos desarrollado muchos servicios en base a datos Copernicus, específicamente datos satelitales Sentinel, y así demostrar aplicaciones operacionales y comerciales en base a estos. Nos dio la oportunidad de exponer y presentar en varios eventos como seminarios, ferias tecnológicas y conferencias.
¿Cómo se potenciará el trabajo conjunto con Eurochile ahora que están instalados formalmente en el país? ¿Qué proyectos conjuntos se podrían trabajar desde ahora?
Se busca de manera activa poder trabajar en conjunto sobre proyectos de transferencia tecnológica en el sector agrícola por ejemplo, sea postulando a fondos o mediante financiamiento privado. Queremos lograr entregar herramientas de agricultura de precisión a cooperativas y productores que aún no tienen acceso a este tipo de datos para optimizar sus procesos y recursos, y ser más competitivo. En el área del turismo también buscamos oportunidades de colaboración, donde el procesamiento de imágenes satelitales puede aportar información acerca del impacto del cambio climático y las implicaciones sobre las actividades turísticas, por ejemplo.